Amor Sancionado
Un bar pequeño, sillas de madera marrón oscuro, las mesas de madera marrón y vidrio espejado en la base. Uno frente a otro.
El café negro muy azucarado, humeante, en blancas tacitas impecables.
Nuestros rostros se reflejan en el espejo de la mesa.
Tus manos en mis manos. Mis manos en tus manos tratando de retener la caricia. Tibia, suave, blanca, roja pasión contenida.
Tus manos prolongación de un amor que no se atreve, que se cubre, se resguarda entre las nubes. Que se niega.
Mis manos, frágiles, fuertes cálidas, blancos jazmines perfumados. Mis manos que solicitan amor, que se prohíben, que sufren, que lloran, que ruegan.
Nuestras manos unidas, un instante de ternura confidente, un segundo de amor imprudente.
Nuestros cuerpos separados por una mesita marrón con base espejada. Reflejo de tanto deseo y privación, tanto amor y miedo. Tanta pasión y sosiego.
Tus manos entre mis manos.
Entrelazados tus dedos finos... ¿Acariciarán mi cuerpo sediento? ¿Rozarán mis ojos llenos de ti?
Tus manos y mis manos unidas en el fruto de un amor que no se inicia, que no madura, que se retiene entre los dedos, lo atan...lo sujetan, lo contienen.
Pasa la gente a nuestro lado... se separan nuestras manos, y sus ojos expresan misericordia.
Y nuestras manos unidas...
Nuestras manos y el secreto de noche contenida.
¡Qué bonito!, me encanta leerte y me deleito con tus metáforas, con ese juego de palabras que alrededor de las manos expresan sentimiendos tan profundos.
ResponderEliminarfue una suerte encontrarte.
Un beso amiga
Gracias!!!... me alegras!!
ResponderEliminarAbro con impaciencia para leer tus comentarios....
ResponderEliminarAplaudo su Gran estilo de plasmar en papel diversidad de imaginación envuelta en la calida cobija de los sentimientos...muy grato encontrar su blog.
ResponderEliminarGracias venika por tu alentador comentario. Gracias nuevamente!!
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